Juego de Datos "Asentamientos de Quijos" |
En esta sección se presenta la información detallada sobre la ubicación y la estratigrafía de 15 unidades o pozos de prueba de 2x1 m excavados con el fin de reconstruir la cronología cerámica local. Así mismo, se presenta la información de 31 unidades de 1x1 m. Si bien estas unidades de 1 x 1 m fueron excavadas con el fin de recolectar muestras botánicas, terminaron proveyéndonos información que fue de utilidad para corroborar la secuencia cronológica de los tipos cerámicos que proponemos.
La selección de la ubicación de las unidades de 2x1 se hizo con base en el estudio inicial de los materiales recolectados durante el reconocimiento. El reconocimiento recuperó un número razonable de materiales que sirvieron para iniciar la clasificación de estos en distintos tipos cerámicos. La elección de la ubicación de las unidades se hizo en función a las áreas de recolección que presentaron un solo tipo cerámico y a las áreas de recolección que presentaron más de un tipo cerámico. Conforme los materiales recuperados de la excavación de los primeros pozos de prueba fueron analizados, y más colecciones cerámicas recuperadas durante el reconocimiento estuvieron disponibles, escogimos nuevos sitios, buscando resolver con cada nuevo grupo de pozos, preguntas de investigación cada vez más específicas. Este proceso paulatino de enfocarnos en preguntas cada vez más específicas, se tornó sumamente productivo conforme ganamos más familiaridad con los materiales cerámicos y nos fue más cómodo clasificarlos en grupos con relevancia cronológica.
Aparte de los materiales cerámicos del reconocimiento, nuestras observaciones de las características del relieve y paisaje de los sitios también fueron importantes al momento de decidir dónde excavar las pruebas estratigráficas de 2x1 m. Esto incluyó visitar los sitios que tuvieran el potencial de contestar nuestras preguntas de investigación (formuladas a partir de las recolecciones del reconocimiento), y escoger uno o dos que tuvieran condiciones favorables para realizar excavaciones con fines estratigráficos. Los sitios en la cimas de las colinas o en zonas planas son menos propensos a estar sometidos a procesos deposicionales que pudieran complicar la interpretación de las secuencias estratigráficas, por lo que durante el proceso de selección se prefirieron estas áreas. Este método para seleccionar sitios con fines cronológicos difiere de lo que comúnmente se estila en la arqueología del Ecuador y de otros lugares, donde la tendencia es elegir el sitio más grande, el montículo más alto, el depósito más profundo, o el que tiene más de cerámica e invertir una cantidad sustancial de tiempo y esfuerzo en una excavación de grandes dimensiones. Esto bajo el supuesto de que un solo sitio puede potencialmente proporcionar mejor evidencia para la reconstrucción de secuencias cronológicas. Pero este no siempre ha sido el caso. La excavación de pozos de prueba pequeños en sitios "poco atractivos" todavía se ve con recelo, que surge de la percepción de que los sitios más "atractivos", inevitablemente, van a producir "más" o “mejor” material. Cuando en realidad son estos sitios "poco atractivos" los que aportan la información cronológica más valiosa. A menudo estos sitios pequeños, sin rasgos de aparente importancia en su superficie tienen, por lo general, la ventaja de estar menos perturbados ya que no atraen la atención de saqueadores. Así mismo, el hecho de que generalmente no producen cantidades abrumadoras de material, hace que puedan ser analizados en mucho menos tiempo, haciendo los resultados accesibles a la comunidad académica más rápidamente. Lo reducido del tamaño de las excavaciones en estos sitios, es otro factor que también contribuye a este fin. La eficiencia de este enfoque está en que permite extender las observaciones hechas para un sitio a muchos otros sitios (incluso los "poco atractivos"), lo que refuerza la interpretación de cada uno de ellos individualmente. La justificación de este enfoque se presenta más ampliamente y de manera convincente por Drennan (1993). Este trabajo constituyó nuestra guía a la hora de diseñar el plan de acción para reconstruir la cronología.
Los pozos de prueba estratigráficos fueron orientados norte-sur (en su eje más largo). La vegetación superficial fue retirada con la ayuda de palas. Una vez que la remoción de tierra empezó, se utilizó alternadamente palas y badilejos. La tierra removida se colocó en baldes que fueron luego tamizados en mallas de 15 mm y el material fue recogido de forma manual. Durante la excavación las capas fueron definidas en base a cambios en las características del suelo, siempre tratando de seguir la estratigrafía natural; sin embargo, la condición húmeda de los sedimentos hizo que este objetivo no siempre fuera alcanzable. Cuando no fue posible percibir los cambios en las características del suelo, se utilizaron niveles arbitrarios de 10 cm; así sucesivamente hasta que se alcanzó el suelo culturalmente estéril. A los niveles se les asignó números consecutivos, siendo el numero 1 el nivel más alto. En ocasiones, se excavó un nivel adicional (entre 5 a 10 cm) con el fin de confirmar que efectivamente se había alcanzado el final de la deposición cultural. Para cada uno de los pozos de prueba estratigráficos se llenó un formulario; en este se incluyó anotaciones sobre la ubicación, relieve, vegetación circundante, así como detalles del proceso de excavación. Para cada uno de los niveles se completó un formulario con la información relevante, como el número de nivel, profundidad, las características del suelo, los materiales recolectados en el nivel (cuando hubo), el número de bolsas de cada tipo de material, el método de recuperación de los materiales (tamizado, recuperación manual) y si se recogieron muestras para fechados radiocarbónicos, así como las referencias de las fotos tomadas durante la excavación. Las bolsas de materiales recuperados en cada nivel de excavación se marcaron con el nombre del sitio, el número de excavación, nivel, profundidad y tipo de material. Los dibujos de perfiles, así como otros bocetos y planos (por ejemplo dibujos de rasgos), se hicieron sobre papel milimetrado, después de terminada cada excavación.
El mapa interactivo de abajo provee información detallada sobre la ubicación, estratigrafía y proporciones cerámicas de cada una de las unidades de 2x1.
Adicionalmente, se excavaron 31 pozos de prueba que tuvieron como objetivo recoger muestras botánicas. Los materiales cerámicos recuperados durante la excavación de estos pozos de prueba fueron usados para corroborar la ubicación cronológica de cada tipo cerámico. Detalles más completos sobre la lógica usada en la ubicación de estas unidades de 1 x 1 se pueden encontrar en el capítulo 6 del volumen publicado del que deriva este documento electrónico.
El mapa interactivo de abajo provee información detallada sobre la ubicación, estratigrafía y proporciones cerámicas en cada una de las unidades de 1x1.
Pulsar sobre el mapa para obtener información detallada sobre cada unidad de excavación
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